En el viaje a Basilea, un descubrimiento. Lovis Corinth (1858-1925). Un pintor alemán considerado uno de los artistas impresionistas más reconocidos de su país. Aunque su pintura, en concreto sus desnudos, me recordaron la obra de Lucien Freud, 40 o 50 años antes.
En el Kunstmuseum de Basilea vi la exposición de sus grabados, litografías, óleos y más que un impresionista lo sentí y vi más cercano al expresionismo. Según lo que he leído tenía mucho interés por Rembrandt, que fue también un excepcional grabador y del que se respira cierta influencia en su obra.
Corinth realizó gran cantidad de puntas secas así como litografías y muchas de estas obras son ilustraciones de libros. Es debido a esto último por lo que me interesó, por su relación con los libros.
Casi todos sus grabados son en blanco y negro, pero en el Kunstmuseum tenían expuestas las litografías a color que realizó para Reineke Fuchs de Johan Wolfang Goethes en 1920, donde pasa de la linea fina típica de la punta seca a una linea mucho más gruesa, acompañada de trazos y manchas de colores.
Y fueron estas la piezas las que me gustaron más de la exposición. La pena es que no tenían ninguna reproducción, sino hubiera podido mostrarlas en esta entrada.