jueves, 13 de septiembre de 2012

Las guardas de nuestros libros




Cuando pienso o medito sobre un libro a editar, en las colecciones de narrativa, pienso en el como un objeto en el que todas las partes que lo componen deben ir al unísono.

No solo imagino el diseño de la cubierta sino también en como debe ser el interior; en la tipografía, en la caja del texto, en la paginación, en si debe o no debe llevar iniciales o si vale la pena que tenga un frontispicio y en último lugar en las guardas.
Las guardas que abren y cierran el libro son importantes para mi ya que considero que son como el telón que se abre y enmarca todo aquello que luego disfrutaremos.

Debido a eso siempre intento que estén en relación con el texto porque lleven alguna imagen o pattern relacionado con la época en la que se escribió el texto o porque estén relacionadas por un cierto aire estético con el relato.

Estas son las guardas que voy a utilizar en el próximo libro de la colección de La Licorne, La mort de Balzac. Es un diseño para papel de pared de Andrew Fingar Brophy realizado en 1903.

Andrew Fingar Brophy fue un diseñador de papeles de pared que trabajó con las más importantes empresas de papel de pared inglesas. Este diseño está inspirado en el tipo decoración utilizada por el arquitecto Robert Adam en el siglo XVIII.


La época de realización del diseño es posterior a Honorè de Balzac, pero tiene un caracter visual que podemos conectar más facilmente con el siglo XIX y no tanto con el Modernismo o Art Nouveau que fue la corriente artística de principios del XX. Y también, debido al tema del texto de Octave Mirbeau, he creído que sintonizaba perfectamente con el ambiente del relato.




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