Hoy de los montones de libros de casa, de esos que poco a poco van creciendo del suelo al techo, he hecho un poco de orden, he sacado y he puesto. He sacado del montón los libros infantiles que tengo que llevar al despacho, y entre ellos he encontrado la correspondencia de Mercè Rodoreda y Joan Sales.
La había dejado aparcada, la compré cuando salió en el 2008 en el centenario del nacimiento de Mercè Rodoreda. Los diferentes actos que se realizaron me suscitaron un vivo interés por la escritora más que por sus libros por ella misma, por su vida. Vi la exposición que se realizó en el Palau Robert y la exposición de sus fotos personales en el Ateneo, y fue debido a todo esto que compré esta correspondencia.
De Joan Sales solo sabía que era el autor de Incerta Glòria, que no he leído, pero que según opinión generalizada es uno de nuestros mejores libros sobre la guerra civil, que volvió del exilio de Méjico en el año 48 y fundó con Xavier Benguerel, Joan Oliver y la ayuda de los editores Aymà "El Club dels Novelistes".
En el exílio en Méjico creó "Quaderns de l'Exili", editor de Marius Torres en la editorial Ariel, y que con El Club fue el editor de Rodoreda, de Llorenç Villalonga, de Lampedusa, de Salinger, de Blai Bonet, etc...
Siempre me han gustado los libros de correspondencia, paso temporadas en las que no leo, pero otras en las que vuelvo a ellos. Supongo que es la necesidad de poder atisbar en la vida diaria de los otros, sobre todos de aquellos que pueden interesarme por diversos motivos.
Este libro son 23 años de correspondencia, 560 cartas entre una autora y su editor, 23 años que tejen un entramado a través del que vamos conociendo a ambos. Rodoreda escribiendo desde París, Ginebra y Barcelona, Sales contestando desde Barcelona, los dos en su cincuentena en 1960 y es en diciembre de ese año cuando se inicia su correspondencia.
Las primeras cartas giran alrededor de la voluntad de Sales de editar la Plaça del Diamant, tienen un tono formal, el lógico entre dos personas que no se conocen, pero en mayo de 1961 Sales movido por el interés en editar el libro, ya le hace sugerencias de cambios de palabras, de vocabulario, que en algunos casos Rodoreda no acepta.
En noviembre del 61 Sales le anuncia a Rodoreda, que su novela saldrá después del Gatopardo de Lampedusa y siguen sus discusiones divertidas sobre si vorera o acera... si quarto fosc o cambra fosca y finalmente harto de que ella no le acepte sus sugerencias le dice:
"Naturalment, si vosté s'hi entossudeix, sortirà ˝cambra fosca˝ en comptes de ˝quarto fosc˝. Però serà un cas molt notable de tossudería. Pot ser és questió de sexe. Les dones sempre han tingut fama de ser més tossudes que les mules –amb perdó sigui dit."....
Ya en el 27 de diciembre de 1961, Sales que debe estar al borde del ataque de nervios, por el tema de las correciones, le dice que su última carta ha sido abrupta y que solo le falta que le diga que es un ˝cul d'olla˝.
La verdad es que me divierto bastante y seguiré...
Empezaré a escribirte una carta
ResponderEliminarpues rondo los cincuenta mismamente,
sabiendo que te gusta recibir,
leer correspondencia... ¿y escribir?
Un beso en el mensaje que te escribo
Ambas cosas, los epistolarios siempre me han gustado.
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