Este año a diferencia del pasado y debido a la cantidad de problemas, que he tenido con la cobertura en Sant Juliá de Vilatorta (Vic), no he hecho ninguna entrada en el blog.
He descansado más que otros años, únicamente dedicada al libro Cocinar en la mar de Lola Jansana y a introducir las correcciones en la novela de Erika Bornay. Por lo que muy poco trabajadora he estado.
También he seguido con la novela del XIX. En Sant Julià he recuperado un libro del año anterior sobre las actrices francesas en el siglo XIX. Los flecos de Marthe de Huysmans todavía me duran y como además estoy inmersa en Guy de Maupassant, no acabo de soltarla. Y también pensaba empezar una biografía de Sarah Bernhardt, que llevo hace tiempo en el bolso, pero no acabo de arrancar a leerla.
En el libro de las actrices del XIX, un apartado que nos habla de la delgada línea que había entre el teatro y la prostitución. Como las actrices acaban traspasandola debido entre otras cosas, a que tenían que costearse su propio vestuario, ya que el teatro no se hacía cargo. El vestuario era carisimo y una parte muy importante de su éxito en escena. Por lo que debían buscarse un protector, que lo pagaba a cambio de ciertos favores.
Finalmente como siempre la vuelta con un poco de estres, ya que tenemos múltiple proyectos a medias. Pero por lo menos alguno ya está en producción. Hemos llevado a la imprenta El cerezo y el último Mudito, el de texto de Kracauer, como novedades de septiembre. Tenemos tambiém El postres i els gelats de Glòria Baliu e ilustraciones de Bernat Cormand junto con El niño perfecto también de Bernat ya casi cerrados.
Pero por encima de todo estoy en estos momentos interesada en dar continuidad a nuestras dos colecciones de narrativa. En La Licorne estoy maquetando Maupassant y aqui os dejo diversas portadas que estoy comenzando a diseñar, he mantenido la misma tipo que en Marthe, pero todavia no acabo de tener claro si mantendré este diseño o haré alguna modificación tipográfica.
Gracias a buscar imágenes para la portada y el frontispicio de La cita y otros cuentos, he descubierto un dibujante del siglo XIX, Paul Gavarni que ilustró los libros de Honoré de Balzac y que me ha gustado mucho. Sus personajes de carnaval me recuerdan a los de Francesco Guardi o (aunque menos naifs) a los de Pietro Longhi. Y he utilizado una de sus imágenes para la portada el libro.
El descubrimiento ha sido gracias a una pequeña publicación sobre El carnaval de París de Yves Gagneux, editada por Paris Musées, les collections de la ville de París. Una colección dedicada a diversos museos. Este en concreto a La maisón de Balzac.
Y a partir de aquí volveremos a retomar el ritmo de siempre.
¡Bienvenida!
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