A parte de libros de cocina, Muditos y otros varios, también tengo ilustrados parados, a la espera de poder solucionar el lió del distribuidor, recuperar el dinero y así poder pagar y poder imprimir nuevos libros, lo que es primordial para poder seguir con nuestra actividad.
Después de días y días intentando recuperar y ordenar todos nuestros libros, que todavía el antiguo distribuidor tiene en sus manos, mejor dicho depositados en el cafarnaum de su supuesto almacén logístico. He aquí un proyecto acabado de montar y maquetar, que se une a todos los que ya tengo en la cola a punto para salir adelante, es el libro, Un dia de feina de María Pagés.
Este es un proyecto que me llegó hace un tiempo, mejor dicho meses antes del verano y que María y yo hemos montado durante varios días en el despacho. Cuando me llegó me gusto por su sencillez, porque es muy blanco y limpio, y como ya debéis haber notado por mis libros tengo bastante debilidad por el blanco. Y también me gustó por la mezcla de línea y collage.
Un libro, que podría afirmar sin lugar a dudas, que es para chicos, pero porque no, al fin y al cabo aunque no sea políticamente correcto decirlo. Y no es una visión segregacionista, sino una constatación de la realidad.
Este libro gira, igual que nuestro libro En Bunyol, en Bitxo i en Bartomeu, alrededor de los juguetes de un niño. En este libro el protagonista de la historía es, el juguete preferido del hijo de la autora, con el que duerme cada noche, una excavadora de plástico.
Y sí, es más fácil que un niño y no una niña jueguen con excavadoras, grúas y camiones. Pero como paradoja, la excavadora protagonista de esta historia lleva como nombre, Dora un nombre de chica.
Todo este material no debe quedar en el cafarnaum de las estanterías, debe ver la luz.
ResponderEliminarSalud
Francesc Cornadó